En el acto, que se desarrolló en el Parlamento de Pau, capital deprtamental, Alli formuló el deseo de que los Pirineos no sean más un obstáculo de separación, sino un vínculo de unión entre las dos comunidades y territorios.

Grenet y el presidente navarro coincidieron en resaltar su interés en incrementar la colaboración entre ambas administraciones, e invitaron a los miembros de las dos delegaciones oficiales a impulsar en adelante toda actuación que sirva para unir a ambos pueblos.

Según el acuerdo firmado hoy, los puentes estarán terminados para 1994: el Goberno de Navarra se encargará de realizar el de Dancharinea, con un presupuesto de unos 120 millones de pesetas, y el Consejo General de los Pirineos Atlánticos construirá el de Arneguy, que tiene un presupuesto de unos 5 millones de franccos, alrededor de 100 millones de pesetas.

Los dos puentes tendrán 10 metros de anchura y, mientras el de Dancharinea incorporará en el centro las oficinas de aduanas, el de Arneguy estará dotado de sendas aceras de 1,50 metros en cada uno de sus márgenes.

Las deegaciones oficiales acordaron también ampliar el intercambio ya existente para la formación y cooperación de agricultores y ganadeeros.

Además, decidieron extender redes comerciales conjuntas y desarrollar intercambios regionales de tecnología, fomentando además la cooperación en proyectos industriales transfronterizos para cogerse a las ayudas de las instituciones comunitarias.

Por último, franceses y navarros intensificarán una mayor colaboración en el ámbito de los deportes de invierno, sobre odo el lo relacionado con el esquí.