En tiempos más rcientes, el accidente más grave es el ocurrido en 1995 en el sector de la minería, cuando quince trabajadores murieron en el pozo San Nicolás de Hunosa, en Mieres (Asturias), por una explosión de grisú.

La tragedia de Cercs ocurrió en la empresa Carbones de Berga, cuando estaban empleadas en ella entre 700 y 1.000 personas, según relató hoy a Servimedia un antiguo empleado de esta compañía que ahora trabaja como bombero en la misma localidad de Berga.

Aquel siniestro, según el relato de este antiuo trabajador, ocurrió por una acumulación de grisú debido a un fallo en el sistema de ventilación. El accidente ocurrió a la vuelta del "puente" de la Fiesta de Todos los Santos, en el mes de noviembre.

En aquel caso, murieron 25 mineros en el acto y cinco posteriormente de las heridas sufridas. El pozo en el que ocurrió la tragedia se llamaba "Consolación". La empresa minera cerró en diciembre de 1992 y en la época en que ocurrió este gravísimo siniestro a las jóvenes de la zona se les daba la alterativa de cumplir el servicio militar trabajando en la mina.