Rumí añadió que el Gobierno parece darse cuenta ahora de que muchos ciudadanos extranjeros, con independencia de su condición legal, viven en condiciones penosas y son objeto de una explotación laboral intolerable en una sociedad avanzada.

"Situación ésta que los socialistas venimos denunciando sistemáticamente, sin que hasta el momento se haya encontrado una respuesta adecuada por parte de la Administración que es a quien le corresponde l responsabilidad de hacerlo", señaló.

La dirigente socialista aseguró que "el accidente de Lorca ha segado la vida de ciudadanos ecuatorianos, como podrían haberlo sido españoles o de cualquier otro país, debido a la existencia en España de más de dos mil pasos a nivel sin barrera. Un anacronismo que entraña situaciones de riesgo y que requiere de actuaciones urgentes desde la Administración, para acometer la definitiva supresión de estos puntos cuya permanencia no puede prolongarse por más tiempo". "El drama de la perdida de tantas vidas desvela con crudeza la realidad de la existencia de muchos inmigrantes en nuestro país que se ven obligados a trabajar en condiciones de explotación y cuyas vidas se desarrollan en situaciones de extrema dificultad", añadió.

"Lamentablemente", prosiguió, "la situación de los inmigrantes que ayer perdieron la vida en Lorca no es excepcional, sino que afecta a muchísimas personas, como consecuencia de la existencia de una elevada economía sumergida que se lucrade su condición de ilegales, como les denomina el Gobierno del señor Aznar".

En su opinión, "el Gobierno debe explicar por qué las inspecciones de trabajo no detectan estas bolsas de explotación infrahumana, cómo es posible que viajen 14 personas en una furgoneta de ocho plazas o por qué ahora se descubre que una menor está trabajando".