Los hechos sucedieron cuando los guardias municipales de Jerez protgían a dos familias que iban a ocupar unas viviendas para profesores de EGB, sin que los adjudicatarios lo fueran. Esto provocó la protesta del resto de los inquilinos, que sí eran enseñantes.

El enfrentamiento se produjo al ordenar el entonces gobernador civil al CNP que impidiese la entrega de los pisos a los no maestros, lo que provocó un enfrentamiento con insultos entre Mariano Baquedano y Pedro Pacheco.

La sentencia, que se conoció hoy, considera que el caso debe volver a los tribunales de erez, cuando exista firmeza jurídica en la decisión de la Audiencia Provincial, ya que los acuerdos tomados en su día por la comisión de gobierno municipal de Jerez y el decreto firmado por el alcalde, Pedro Pacheco, pueden contener algún tipo de anomalía jurídica, sin descartar el delito en la actuación administrativa local.