Sin embargo, el tribunal condena en la misma sentencia al industrial Francisco Arratibel a una pena de 2 años de cárcel por encontrarle culpable de esos mismos hechos, aunque es probable que Arratibel no ingrese en prisión ya que a esa condena se deberán descontar los 16 meses que pasó en prisión preventiva.

La sentencia, hecha pública hoy, rechaza el establecimiento de indemnizaciones para Revilla, ya que ése renunció a ello durante el juicio, aunque el tribunal ha fijado para Arratibel el pago de una multa de 125.000 pesetas.

El fallo dice que la conducta de Elosúa y Arratibel se puede enmarcar en un delito de colaboración con banda armada, ya que considera que su actuación sirvió de cauce para las exigencias de ETA en la obtención de sus medios económicos necesarios para su subsistencia.

Asimismo, haciendo suyas las tesis del fiscal, la sentencia afirma que ambos procesados actuaron impulsados porun estado de necesidad, ya que pretendían evitar la muerte del secuestrado, circunstancia que prevalece sobre la posible defensa de los intereses de ETA y el ánimo de lucro.

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