"A falta de votos, la derecha ha opuesto la sinrazón, negándose a que se apliquen las reglas y las costumbres establecidas normalmente en la Junta de Portavoces para configurar el orden del día del pleno", dijo Almunia en la rueda de prensa posterior a la reunión de la Permanente de la Comisión Ejecutiva del PSOE. Agregó que no hay precedentes de maniobras obstruccionistas en el Congreso como las practicadas en esta cuestión por el PP, al tiempo que advertió que los socialistas "no estamos dispuestos a que en el Parlamento no se pueda debatir de lo que queremos debatir los parlamentarios".

A su juicio, intentar callar la voz del Parlamento es un "atentado contra la democracia" porque las decisiones de toman por mayoría, pero las minorías también tienen derecho a que sus iniciativas sean debatidas.

"Quie no entienda eso no entiende lo que es una democracia parlamentaria", prosiguió, "me temo que hay quienes no entienden lo que es una democracia parlamentaria y están dispuestos, al parecer, a utilizar todo tipo de obstáculos" para impedir este debate.

Sin embargo, concluyó, "no nos vamos a quedar callados, vamos a llegar hasta el final, vamos a tratar de que se cumplan las normas del Reglamento del Congreso y los usos y costumbres de un Parlamento democrático y, si no es posible hacerlo, llevaremos lacuestión al Tribunal Constitucional".

Almunia recordó que los socialistas ya acudieron al Tribunal Constitucional en la legislatura pasada, cuando "una mayoría de derechas, contra toda lógica parlamentaria y violando las reglas más elementales de un Parlamento democrático, se negó a admitir la tramitación" en el Senado de un proyecto del Gobierno socialista.