ABORTO. LOS GINECOLOGOS SAENZ DE SANTAMARIA Y STOLZENBURG CRITICAN LA SENTENCIA DE BARCELONA Y LA LEY DEL ABORTO
- Los dos fueron indultados por el Gobierno socialista
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
Los ginecólogos Germán Sáenz de Santamaría y Luis Alberto Stolzenburg, condenados ambos por delito de aborto e indultados por el Gobierno en 1991 y 1993, respectivamente, criticaron hoy la sentencia que conena a dos ginecólogos de Barcelona por realizar abortos, así como la Ley vigente sobre esta materia y el "doble rasero" con que, a su juicio, se aplica la misma, "sin tener en cuenta la voz de la mujer".
Germán Sáenz de Santamaría manifestó a Servimedia que el caso de los dos ginecólogos de Barcelona "es la misma historia de siempre", que se reduce a "simples vendettas o venganzas" por parte de aquellos amantes o maridos que se vieron privados de su paternidad.
Asimismo, Sáenz de Santamaría critió que la convicción moral de los jueces esté siempre por encima de la ley y la voz de los médicos y mujeres que deciden practicar el aborto. "A una persona no se la puede condenar en función de convicciones morales. Si los médicos dicen que el embarazo estaba en fase de expulsión, la mujer coincide con ellos y nadie demuestra que es mentira, no sé por qué le pueden condenar", dijo.
Tras señalar que a su juicio el Poder Judicial "es un garante de los grandes delincuentes de Estado y, a la vez, verdugo e la gente sencilla", este ginecólogo indultado en 1991 agregó que mientras no se acabe con la "incertidumbre" que causa la aplicación de la Ley del Aborto, continuarán registrándose casos como el suyo y el de los dos ginecólogos de Barcelona.
ERA CAVERNARIA
Por su parte, Luis Alberto Stolzenburg manifestó a Servimedia que la "vergonzosa e indignante" condena de Barcelona deja patente que España vive aún en la era "cavernaria", donde el aborto era una práctica clandestina y sin una protección sanitaia que evitase las altas tasas de mortalidad y morbilidad maternal por esta intervención.
"Si no fuera porque uno lee los periódicos, cualquiera pensaría que ésto (el caso de los ginecólogos de Barcelona) es de hace 20 ó 30 años", dijo Stolzenburg, para quien la condena de Barcelona supone un "atropello descarado" de los derechos de la mujer, que es quien debería tener la última palabra, pues es a quien afecta directamente la gestación.
Asimismo, señaló que la sentencia de Barcelona supone un "ancronismo inaceptable y extremo en una sociedad que quiere apuntarse a la modernidad en todos los aspectos económicos y políticos, pero que se niega a avanzar en campos como el sanitario", cuando en países tan conservadores como Inglaterra y Alemania no existen problemas con el tema del aborto.
A su juicio, la Ley del Aborto es una "falacia" y su aplicación una "hipocresía", teniendo en cuenta que, según los entendidos, en España se practicaron el doble de los 40.000 abortos notificados legalmente a la autoridades sanitarias durante el último año.
(SERVIMEDIA)
29 Abr 1997
VBR