ABORTO. FELIX PONS DESOYE LA PETICION DEL PSOE E IU Y NO CONVOCA UN PLENO LA PROXIMA SEMANA PARA APROBAR LA AMPLIACION DEL ABORTO

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente del Congreso, Félix Pons, anunció esta tarde su decisión de no convocar un pleno extaordinario la próxima semana para aprobar la ley del aborto, como han solicitado PSOE e Izquierda Unida, para "no crispar más la vida política", a la vista del rechazo categórico que han expresado a esta solicitud Partido Popular y CiU.

Con esta decisión, se entierran prácticamente todas las posibilidades que quedaban para que la ley pudiera ser aprobada antes de la disolución de las Cortes a finales de diciembre. Ahora, sólo un alargamiento de la legislatura más allá del mes de marzo anunciado por Feipe González podría permitir su aprobación.

Pons compareció en rueda de prensa para explicar su postura tras la agria controversia que suscitó la reunión de ayer de la Mesa del Congreso, en la que se rechazó, con los votos del PP y de CiU, el pleno solicitado por socialistas e Izquierda Unida para aprobar el proyecto de ampliación del aborto y remitirlo al Senado.

El presidente de la Cámara Baja comenzó dejando clara su negativa a convocar de nuevo la Mesa del Congreso, como han pedido socialista e IU, para estudiar el dictamen que la reunión de ayer acordó encargar a los servicios jurídicos, a instancias de PP y CiU, antes de convocar el pleno.

Dijo que la celebración de la Mesa sería una "frustración inútil", toda vez que este órgano no puede celebrar reuniones al haber advertido populares y nacionalistas catalanes que no acudirían.

Según Pons, no ha querido hacer ejercicio de las facultades que le concede el Reglamento del Congreso para convocar un pleno del Congreso, porque ello sólohabría contribuido a "crispar y tensionar la vida política y parlamentaria".

"En los últimos meses se han hecho bastantes cosas que no debieran haberse hecho, algunas que no se ha habían hecho nunca antes y otras que no deberían haberse hecho jamás. No quiero contribuir a añadir ningún elemento de tensión institucional a la vida política", subrayó.

Recordó que la convocatoria del pleno habría sido una decisión insólita en el Parlamento, que en ningún caso debe utilizarse "en contra de los interess de una parte de la Cámara".

En su opinión, no es cierto que PP y CiU hayan vulnerado el Reglamento, como han denunciado PSOE e Izquierda Unida, al pedir un informe a los servicios jurídicos. "La decisión de la Mesa de ayer", manifestó, "se ajustó al Reglamento".

Cuando se le preguntó si no lamenta que su decisión vaya a ser con toda probabilidad la culpable de la no aprobación del proyecto de ley, Pons dijo que sólo al Gobierno y a la oposición, y no a él, se le puede atribuir el éxito o el fraaso de la ley.

"El uso que los protagonistas de la vida parlamentaria hayan hecho de sus competencias no puede desembocar en descargar la responsabilidad política en el presidente del Congreso", subrayó.

Félix Pons garantizó que el Grupo Socialista no le ha hecho ninguna "sugerencia" de actuación en las últimas horas. Muy al contrario, aseguró, ha "respaldado y respetado mis decisiones".

(SERVIMEDIA)
29 Nov 1995
JRN