Las edades de las menores atacadas oscilaban entre los 12 y los 17 años y fueron abordadas por el presunto violador cuando éstas hacían auto-stop en las carreteras de Durango (Vizcaya) y de Zumaya (Guipúzcoa), según informó la Policía Autónoma Vasca.

Las mismas fuentes aseguraron que S.P.F. paraba a las jóvenes ue se encontraban haciendo auto-stop. Después de montarse en él vehículo S.P.F. se desviaba de la carretera y las llevaba a un lugar apartado de las vias principales donde, en cinco casos llegó a consumar la violación, mientras que en los otros cuatro, las menores lograron zafarse.

El presunto violador, durante los dos años que distancian la primera con la última agresión, utilizó dos automóviles diferentes: un Renault 11 que luego cambió por un Citroen AX, debajo del asiento del cual la Ertzaintza enontró un cuchillo de grandes dimensiones que el individuo utilizaba para amenazar a sus víctimas. Asimismo, llegó a amedrentar a las jóvenes con una pistola de aire comprimido.

Tras su detención, las nueve menores atacadas reconocieron a S.P.F. en una rueda de reconocimiento por lo que fue posteriormente encarcelado en la prisión donostiarra de Martutene.

El caso está siendo llevado por dos jueces de la localidad guipuzcoana de Azpeitia quienes, en un primer momento, decretaron el secreto de sumaio de las diligencias quedando, en estos últimos días abierto a la espera del posterior juicio.