Así lo afirmó durante un discurso con motivo de la festividad de Santiago Apóstol, con el que lamentó que este día de fiesta nacional llegue en un momento “muy difícil” para los ciudadanos, y apuntó que, “aunque algunos traten de silenciarlo y otros traten de ocultarlo con burda propaganda”, la situación que afronta la mayoría social de España es “realmente dramática”.

En este sentido, comentó que “la inflación ha acabado con los ahorros que tanto costó guardar a las familias y que los precios de los bienes de primera necesidad y de los suministros se han disparado”, por lo que los españoles “no llegan a fin de mes”. Además, el paro y la precariedad “se extienden y se hacen crónicos”. En estas fechas, lamentó que “muchos padres están teniendo que explicar a sus hijos que este año no podrán irse de vacaciones”.

Abascal denunció que, mientras todo esto ocurre, “continúa el expolio fiscal que sufren fundamentalmente las clases medias y populares, sigue la degradación de nuestros barrios, crece la inseguridad y aumentan otros problemas como la despoblación, la crisis del sector primario o la desindustrialización”.

El líder de Vox remarcó que este panorama “no es fruto de la casualidad”, sino que “hay culpables”. Sobre este asunto, criticó que los españoles “padecen un Gobierno ajeno a sus preocupaciones cotidianas” y añadió que, "por desgracia", no solo el Gobierno, “también son los medios, los sindicatos comprados, la patronal, los lobbies energéticos y algunos bancos”.

Abascal presumió de que Vox ha actuado en toda España “como la única y verdadera oposición” porque, “en una coyuntura como la actual, solo Vox ha exigido rebajar drásticamente el IVA de los bienes de primera necesidad, subir los salarios reduciendo las cotizaciones sociales, terminar con el gasto político o derogar la ley climática que prohíbe a los españoles explorar y explotar nuestros recursos”.

El líder Vox comentó que han hecho mucho, pero constató que “hace falta más”, porque “sabemos que no es suficiente”. “No puede serlo mientras España siga estando al borde de la quiebra social, económica y nacional”, advirtió.

Por eso, prometió que Vox trabajará "sin descanso, solos o con aquellos que se quieran unir a nuestro camino, para hacer posible la alternativa y para hacer posible que la España oficial se parezca al final a la España real”.