En el proyecto de Presupuestos se explica que el mayor volumen de las políticas de vivienda corresponde a los créditos asignados a programas de promoción, administración y ayudas para la rehabilitación y acceso a vivienda, y contiene los créditos destinados a ejecutar los Planes Estatales de Vivienda.

Además, 323 millones se destinarán a atender los compromisos derivados del pago de la Renta Básica de Emancipación, la ayuda de 210 euros al alquiler para jóvenes.

Las cuentas del Estado para el próximo ejercicio incorporan, además, otros 6.417 millones en ayudas fiscales para facilitar el acceso a la vivienda y para el fomento de la edificación.

La parte más importante de las ayudas fiscales lo constituye la deducción por inversión en vivienda habitual, que alcanza un gasto de 2.928,4 millones de euros, a pesar de caer un 33,7% en comparación con 2010.

Mientras, la exención por reinversión en vivienda habitual alcanzará los 232,1 millones de euros (-75,7%) y la deducción por alquiler de vivienda habitual supondrá 184,4 millones (-47,3%).

Por su parte, la reducción sobre arrendamientos de viviendas (no se tributa con carácter general por la mitad del dinero recibido) tiene un coste de 305,3 millones, un 3,1% menos.

La nueva deducción por obras de mejora en la vivienda habitual permitirá ahorrar a los contribuyentes unos 1.033 millones de euros.