Así, la organización en nombre de sus miembros expresó que condena “enérgicamente” los planes del Dove World Outreach Center para quemar ejemplares del Corán al considerar que el acto constituye una grave falta de comprensión en la búsqueda de crear una convivencia pacífica con todas las personas, independientemente de sus creencias.

También afirmó que como cristianos están “llamados por encima de cualquier circunstancia” a amar a su prójimo y procurar su bien gracias al respeto mutuo y demostrando el carácter de su fe.

Además, señaló que en “ninguna parte de la Biblia” ni en sus “tradiciones” se encuentra la recomendación de ir en contra de otras religiones o de destruir sus libros sagrados y ha reconocido que la quema del Corán implica “herir innecesariamente los sentimientos de todos los creyentes de fe islámica”.

No obstante, la Alianza Evangélica Española resaltó que la solidaridad y el respeto entre creyentes de diferentes religiones debe ser recíproco y ha reclamado a la comunidad islámica que condene “los actos de agresión a la libertad de conciencia” en los países islámicos donde “la Biblia es un libro prohibido”.