Dichos fondos permitirán adaptar una decena de plazas y avenidas aledañas al centro histórico amurallado de la ciudad, reconocida como Patrimonio de la Humanidad en 1997 por la UNESCO.

Las obras darán comienzo a partir del próximo mes de octubre, con el fin de rebajar los bordillos de las aceras en los cruces, para hacerlos accesibles a usuarios de sillas de ruedas.

También se instalarán semáforos sonoros así como bandas en relieve en el suelo para facilitar el cruce de las calles a los viandantes ciegos y con discapacidad visual.

Una vez concluidos dichos trabajos, las autoridades de Carcasona proyectan mejorar la accesibilidad en el centro histórico de la ciudad.

La localidad también ha creado 30 plazas de aparcamiento para personas con discapacidad durante los últimos 9 meses.