Controladores. Blanco: Todo es negociable dentro de la ley, pero sin "triquiñuelas"

LUGO
SERVIMEDIA

El ministro de Fomento, José Blanco, dijo este miércoles en Lugo que la convocatoria de huelga por parte de los controladores aéreos es "injusta" y está "injustificada", porque "sólo pretende mantener unos privilegios que el ministerio no está dispuesto a mantener".

En todo caso, quiso tender un puente para buscar el entendimiento con este colectivo y dijo que "todo es negociable en el marco de la ley", siempre que los protagonistas de este conflicto abandonen "las triquiñuelas" que están dilatando los posibles acuerdos.

Señaló que ambas partes están "intentando negociar un convenio desde el año 2005", porque los controladores "cada día sorprenden con una nueva tabla reivindicativa". A su juicio, "es demasiado tiempo en la mesa de negociación", por lo que sólo se mostró dispuesto a "dialogar" con este colectivo "desde la seriedad y el rigor" y no "en base a un cambio de posiciones en función del día".

"Vamos a hacer un esfuerzo de negociación a partir de la última tabla reivindicativa, que contradice lo que dijeron hasta hace pocos días", recordó el ministro, porque los controladores se quejaban de que el decreto "que regula la actividad y el tiempo de descanso era malo", pero en las propuestas que presentaron ayer piden "que se aplique de forma inmediata, porque mejora sus condiciones de trabajo".

Anunció que el Gobierno intentará "abordar los puntos de la tabla reivindicativa" presentada por los controladores, con la esperanza de que ese documento "sea el definitivo", pero siempre con "la máxima transparencia y respeto a la ley". De hecho, reiteró que "dentro de la ley todo es posible, pero al margen de ella, nada es posible".

Con relación a la convocatoria de huelga, el ministro dijo que "no es justificable que contribuyan a las dificultades que tiene el sector aéreo, con la repercusión que tiene, además, sobre uno de nuestros motores económicos, como es el turismo".

ACUSACIONES SINDICATOS

También se refirió a las acusaciones de los sindicatos, que lo calificaron como "irresponsable y autoritario", y dijo que el Gobierno tiene que tomar "decisiones que nos permitan ser más competitivos, bajando las tasas de navegación".

Indicó que "toda la sociedad sabe que es un colectivo que gozaba de unos privilegios exagerados, que tenía la productividad más baja de toda la Unión Europea y los salarios más altos".

En todo caso, dijo que "irresponsable es quien se queja de fatiga y de estrés y después de la inspección médica se tiene que incorporar al trabajo"; quien trata de mantener "unos privilegios abusivos", cuando "la sociedad está atravesando una crisis"; o quien "se sienta en el año 2005 en una mesa de negociación y no tiene voluntad de acordar", porque aspira a mantener unas condiciones laborales "que no existen en ningún lugar del mundo".

"Deseo que acepten la ley, que emana de la voluntad popular, porque ha sido aprobada prácticamente por unanimidad en el Parlamento, y que cumplan con su obligación y asuman su responsabilidad para poner punto y final a una situación que, desgraciadamente, dura demasiado tiempo, y cuyas víctimas son las compañías aéreas y los ciudadanos que no entienden este tipo de actuaciones", reiteró el ministro.

"Deseo que se llegue a un acuerdo y seré el primero en ponerlo en valor, pero estamos un poco cansados de las triquiñuelas que tratan de dilatar los acuerdos y ganar tiempo", concluyó el titular de Fomento.

(SERVIMEDIA)
04 Ago 2010
NLV/gja