En declaraciones a Servimedia, Boix consideró la decisión del Parlamento de Cataluña de prohibir las corridas de toros "un atentado a una parte de mi país" y, por ello calificó el día de hoy de "triste para quienes tenemos en la libertad nuestro bien más preciado y que tanto nos ha costado conseguir".

Respecto a las consecuencias económicas de esta decisión, Boix aseguró que "hay mucha gente que se va a quedar en el paro; mucha gente que recibía ingresos indirectos, que no los va a poder recibir; y va a haber un señor empresario al que se les van a regalar cientos de millones de euros". "Las consecuencias son importantes", afirmó.

Además, desde su punto de vista, la prohibición de la fiesta taurina en Cataluña también tendrá consecuencias en las relaciones entre Cataluña y España, que, dijo, "si ya eran complicadas después de la sentencia del TC, ahora lo van a ser todavía más".

A nivel personal, Boix aseguró que es un "damnificado" desde la parte material, "porque se nos impide venir aquí a ejercer nuestra posición", pero también desde la parte sentimental porque "yo soy aficionado catalán de toda la vida", subrayó.

"Mi abuelo, mi bisabuelo, mi padre, mi familia, mi mujer, mis hijas...somos damnificados emocionales y eso es algo muy grave y muy triste", aseveró.

Sobre cómo afectará la decisión aprobada hoy al diestro José Tomás, Boix recordó que está convaleciente todavía y se limitó a decir que "en Barcelona no se van a poder dar toros a partir de 2012", por lo que "el público de Barcelona no va a poder comulgar anímicamente con José Tomás, como ha ocurrido tantísimas veces".

Asimismo, reiteró que la plaza de Barcelona ha sido de las más importantes de la carrera de Tomás y lamentó que "esto se va a terminar para desgracia de todos".