La compañía alimentaria tuvo una facturación de 882 millones de euros al cierre del primer semestre de 2009, 456 millones de euros superior a la del mismo período de 2008 gracias, fundamentalmente, a la fusión que el pasado mes de diciembre llevó a cabo con Groupe Smithfield. En términos comparables, la facturación fue un 3,5% inferior a la del año anterior debido a la caída del consumo que en estos meses se ha producido en el conjunto de Europa.

El resultado bruto de explotación (Ebitda) registrado por la compañía en los primeros seis meses del año fue de 60,2 millones de euros, 26,5 millones de euros mayor que el del primer semestre de 2008. Esta cifra incluye unos gastos de reestructuración por valor de 8,3 millones de euros.

La compañía destacó "el favorable comportamiento que Campofrio Food Group ha mantenido en sus respectivos mercados durante estos seis meses, especialmente destacable en un contexto económico adverso como el actual".

Asimismo, la empresa mantuvo en el periodo su rentabilidad por medio de la reducción de costes y de la aceleración de la captura de sinergias, que alcanzarán los 40 millones de euros en 2012, año a partir del cual serán recurrentes.

"Estamos muy motivados por estos buenos resultados, obtenidos durante un periodo de difíciles condiciones económicas, así como por el esfuerzo adicional necesario que hemos realizado para integrar con éxito las dos entidades predecesoras de la nueva Campofrio Food Group", dijo el consejero delegado, Robert Sharpe. "Creemos que estos resultados establecen una sólida base para la segunda mitad del año", añadió.