Suspendido un cura holandés por hacer una misa “futbolera” para apoyar a su país en la final del Mundial

MADRID
SERVIMEDIA

Un cura holandés ha sido suspendido por celebrar el pasado 11 de julio, horas antes de que España y Holanda disputaran la final del Mundial de fútbol de Sudáfrica, una misa “futbolera” ataviado con una sotana naranja y con una portería y un balón Jabulaní presidiendo el altar.

El sacerdote suspendido, Paul Vlaar, llevaba la bandera holandesa pintada en las mejillas y había decorado su iglesia de Obdam, una localidad a unos 40 kilómetros al norte de Ámsterdam, con motivos futbolísticos, según se puede apreciar en las imágenes captadas por la televisión local RTVNH.

Los feligreses abarrotaron el templo portando bufandas naranjas y camisetas de la selección de Sneijder, Robben y compañía. Uno de los parroquianos decidió probar los reflejos del cura Vlaar lanzándole un penalti en el pasillo de la iglesia, un disparo que el sacerdote acertó a detener.

“El obispo ha decidido suspender al padre Vlaar con efecto inmediato para que se tome un periodo de reflexión”, señaló la diócesis de Haarlem, de la que depende la iglesia de Obdam, en un comunicado publicado por el diario belga “Le Soir” y recogido por Servimedia.

La diócesis asegura que el atuendo del cura “no rendía el homenaje debido a la santidad” y calificó la decoración de la iglesia de “profana”.

El padre Vlaar aprovechó además la misa para rezar por su equipo, una oración que no debió ser atendida como él deseaba, ya que Holanda acabó sucumbiendo por un gol a cero ante España.

(SERVIMEDIA)
17 Jul 2010
DCD/gja