En su segunda intervención en el Debate sobre el Estado de la Nación, Rajoy adujo que España "precisa de otro gobierno con un periodo de cuatro años" por delante para el que pueda presentar un programa de reformas.

Rajoy criticó que "no se puede confiar" en Zapatero porque "ha liquidado" su programa electoral y la guía política que presentó ante el Parlamento en el discurso de investidura.

Reconoció que España necesita "un gran acuerdo nacional" que una a los partidos políticos, a los empresarios, los sindicatos y el resto de los agentes sociales. "Pero el obstáculo es usted", apostilló mientras miraba a Zapatero.

Rajoy criticó el "travestismo político" del presidente del Gobierno por haber cambiado de criterios y de propuestas en los dos años que han transcurrido de legislatura.

Además, se preguntó "cómo se puede confiar" en una persona que "dice una cosa y hace exactamente la contraria" sobre la reforma laboral o sobre el recorte del gasto público.

Incluso, le imputó haber cometido un "atentado" contra los jubilados por haberles congelado las pensiones con el recorte del gasto público aprobado mediante decreto ley.

Rajoy reprochó al jefe del Ejecutivo que en la réplica subiera a la tribuna para criticar que el PP no presente alternativas y le recordó que lleva meses presentando propuestas en materia económica.

Después de que Zapatero le acusara de haber insultado al Gobierno, Rajoy recurrió a la ironía para retirar todo lo que hubiera podido ofender al presidente reconocerle como "el mayor estadista de la historia" y definirse a sí mismo como "el peor político que habrá conocido la Humanidad".