Este acuerdo supone una nueva contribución al Fondo Fiduciario Global del Programa de Doha para el Desarrollo, según informó el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.

El Consejo General de la OMC estableció la creación de un Fondo Fiduciario Global para la Cooperación Técnica, al que a partir del 1 de julio de 1999, los Miembros de la OMC podían hacer llegar sus aportaciones. La asistencia técnica que presta este Fondo tiene como objetivo ayudar a los países en vías de desarrollo a aplicar las reglas y disciplinas de la OMC y a ejercitar sus derechos como miembros de esta organización, de forma que puedan ser partícipes de los beneficios que se derivan de los procesos de liberalización comercial multilaterales.

España realizó su primera aportación a este Fondo en el año 2001 por un importe de 100.000 euros. Desde entonces, las aportaciones españolas a este fondo ascienden a 2.654.000

Se trata de un fondo de ayuda desligada y, por tanto, no es posible establecer ningún tipo de requisito de participación de empresas en las aportaciones que se realicen, si bien se admite una cierta vinculación a un área determinada. España ha acordado con la OMC que las actividades que se realicen con sus contribuciones se destinen a la región de América Latina y el Caribe.

Para el ejercicio 2010, España ha seleccionado actividades de formación en áreas como agricultura, servicios y acceso a mercado de productos no agrícolas, buscando la cofinanciación con instituciones locales.