Eso supone un descenso del 46,1 por ciento respecto a los 152.863 regulados del mismo periodo del año pasado, en el que ya se produjo una disminución a la mitad en relación a 1993, punto culminante de la crisiseconómica y 'año negro' para el empleo.

La disminución de los expedientes de regulación alcanzó a sus tres modalidades. Los despidos colectivos afectaron a 26.439 personas, los expedientes de suspensión temporal de empleo a 54.831 y los de reducción de la jornada de trabajo habitual a 1.096.

La reducción de los regulados en los seis primeros meses del año se basó, entre otros factores, en la buena marcha durante ese periodo del sector del automóvil, que recurre habitualmente a expedientes de reguación cuando tienen problemas de sobreproducción.

Las causas más frecuentemente alegadas por las empresas al solicitar la autorización de los expedientes fueron los problemas de financiación y la falta de demanda.

Los expedientes afectaron en mayor medida a las empresas pequeñas y medianas, muchas de las cuales sufren indirectamente el efecto del ajuste de producción de las grandes compañías, cuando son suministradoras de ellas.