Según explicó a Servimedia uno de los afectados, Ginés G., los hechos se produjeron hacia las dos de la mañana del domingo, cuando él y sus amigos quisieron coger un taxi, de los tres que había estacionados en la parada del Hotel Chamartín, en Madrid. Sin embargo, sus conductores les fueron enviando de uno a otro hasta admitir, finalmente, que la carrera, que finalizaría en la zona de Sol, no les interesaba.

Cuando Ginés trató de fotografiar a los taxis, cuenta él mismo, los conductores respondieron a la acción con insultos tales como "chupapollas, imbécil o desgraciado", siempre según el relato de los afectados.

Finalmente, los tres chicos llegaron a su destino en un taxi que dejaba a esa hora a unos clientes en el mencionado hotel y que accedió a realizar el servicio que Ginés, Mari Carmen y Laureano (sus dos amigos) le solicitaban.

En opinión de Ginés, el asunto, que califica de "humillante", no parece "de discriminación" por su problema visual, pero es, igualmente, inaceptable, porque los taxistas "estaban de servicio en la parada", con el indicador de "Libre" puesto y tenían la obligación de coger clientes.

Por este motivo, y para que algo así no se repita, los tres chicos quieren que los taxistas "no queden impunes" y denunciarán "todo lo que haga falta".

Servimedia ha intentado conocer la opinión que tiene sobre los hechos la Asociación Gremial de Auto Taxi de Madrid, pero le han derivado en todo momento a Julio Moreno, su secretario, con quien ha sido imposible contactar.