Así lo anunció el director general de la CECA, José Antonio Olavarrieta, durante su intervención en un curso de verano organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) en Santander.

En concreto, solicitan un tratamiento fiscal neutro, con la intención de establecer exenciones en el Impuesto de Transmisiones y Actos Jurídicos Documentados (ITP-AJD).

Según la CECA, las cajas se están enfrentando a un tratamiento fiscal "perjudicial" en comparación con las fusiones tradicionales y puede suponer "un freno" al proceso de integración de las cajas mediantes los SIP.

En este tipo de integración, según detallan las cajas, perviven personas jurídicas de las entidades que participan, situación que las diferencia de las fusiones tradicionales en las que la conversión en una única persona jurídica se beneficia de una neutralidad fiscal en cuanto a la tributación por IVA y por el ITP-AJD.

La tributación por IVA en el régimen especial supone que en las prestaciones de servicios que la entidad central realice a las cajas integradas se grave por IVA únicamente el coste de los servicios adquiridos fuera del grupo, con lo que no se incrementan los costes por IVA soportado no deducible.

En relación al Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, la CECA pide que Hacienda se centre en exenciones subjetivas similares a las que actualmente disfrutan las sociedades de garantía recíproca y las sociedades de refinanzamiento.

EL TRABAJO "ESTÁ HECHO"

El director general de la CECA aprovechó para recordar que las entiades financieras españolas no han pedido ni un sólo euro de dinero público, sino que han acudido al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob), que deberán devolver con un interés del 7,75%.

Olavarrieta reconoció que la crisis ha sorprendido a alguna entidad financiera, pero la reestructuración "se ha hecho en tiempo y forma y hemos conseguido llegar". En este sentido, reconoció que es posible que en "algún momento muy concreto" alguna entidad podría haber empezado antes.

"La concentración del sistema financiero se produce ante un cambio de ciclo, pero no hay ningún drama en ello, vamos a necesitar cajas más grandes", dijo el director general de la CECA, tras añadir que "el grueso de la concentración está hecho".

Según sus cálculos, tras el proceso de integración que está concluyendo, de las 45 cajas que existían el número se rebajaría hasta las 21 entidades.

Por otra parte, Olavarrieta coincidió con la Asociación Española de Banca (AEB) en la necesidad de hacer públicos los "stress test" que se han hecho sobre las entidades financieras.

"Si quieren hacer stress test, que hagan todos los que quieran, porque somos el único país que ha hecho los deberes", sentenció Olavarrieta.

Según el director general de la CECA, todas las cajas están en beneficios "y van a seguir estándolo", aunque "no va a ser un año fácil, al contrario, va a ser un año muy difícil".

Por último, Olavarrieta defendió que las cajas no están politizadas. En este sentido, ironizó diciendo que sólo reconocerá que una caja está politizada cuando el cliente acuda a la entidad y le pregunten a qué partido vota.