Fernández hizo estas declaraciones con motivo de la celebración mañana del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.

Agregó que la enfermería es la puerta de entrada de muchas mujeres maltratadas a los servicios de atención porque estos profesionales, en su mayoría mujeres, mantienen un contacto frecuente con los pacientes, por lo que tienen el perfil idóneo para detectar situaciones de riesgo de violencia de género y cuándo se produce el maltrato.

La vicepresidenta del Consejo de Enfermería añadió que “no podemos dormirnos, debemos actuar y debemos hacerlo ya”. A este respecto, el presidente del Consejo, Florentino Pérez Raya, subrayó que “es necesario que la enfermera tenga en mente esta situación y, llegado el momento, sepa cómo preguntar a la mujer si tiene problemas con su pareja o si todo va bien en casa”.

Ante síntomas inespecíficos, la enfermera debe prestar mayor atención a síntomas como la fatiga permanente, fibromialgia, síndrome de colon irritable, dolores crónicos o problemas gastrointestinales, entre otros.

También pueden aparecer síntomas de tipo psicológico o de conducta como fobias, ataques de pánico, alteraciones del sueño, trastornos psicosomáticos, trastornos de la alimentación, sentimientos de culpabilidad, falta de cuidado personal e incluso ideas o intentos de autolesionarse.