Según informó el Instituto Armado, la detención de estos sospechosos, ambos de nacionalidad española, tuvo lugar al sur de Tarifa, cuando una patrullera observó una embarcación con motor fueraborda por la zona.

Los agentes procedieron entonces a aproximarse a la lancha para identificar a sus tripulantes. Éstos, al verse sorprendidos, comenzaron a arrojar al agua los fardos de droga que transportaban.

La rápida actuación de los guardias del Servicio Marítimo impidió que los sospechosos pudieran deshacerse de toda la mercancía, ya que consiguieron recuperar los fardos que habían sido arrojados al mar e intervenir igualmente los que aún quedaban en el interior de la embarcación.

Del mar fueron rescatados seis fardos que se encontraban atados entre sí y en su extremo a una pesa, que debía facilitar que la droga se hundiese. En total fueron aprehendidos 24 paquetes de droga que arrojaron un peso aproximado de 850 kilogramos.