El cambio climático actual no tiene precedentes en 100 millones de años
- Las temperaturas de los océanos eran más frías de lo que se pensaba
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El actual periodo de cambio climático no tiene precedentes en los últimos 100 millones de años porque la temperatura de los océanos no era entonces 15 grados más altas que las de ahora, como se pensaba, sino más frías.
Así lo sugieren cinco científicos del Centro Nacional Francés de Investigación Científica, la Universidad de la Sorbona y la Universidad de Estrasburgo (Francia), así como del Instituto Federal Suizo de Tecnología en Lausana y la Universidad de Lausana (Suiza), que han publicado un estudio en la revista ‘Nature Communications’.
La metodología ampliamente utilizada por la comunidad científica indica que la temperatura de las profundidades oceánicas y la de la superficie del océano polar hace 100 millones de años eran alrededor de 15ºC más altas que las actuales.
Sin embargo, el nuevo estudio desafia ese enfoque porque las temperaturas oceánicas pueden haberse mantenido relativamente estables en este periodo, lo que plantea serias preocupaciones sobre los actuales niveles de cambio climático.
"Si tenemos razón, nuestro estudio desafía décadas de investigación paleoclimática", dice Anders Meibom, director del Laboratorio de Geoquímica Biológica del Instituto Federal Suizo de Tecnología en Lausana y profesor de la Universidad de Lausana, quien añadió: "Los océanos cubren el 70% de nuestro planeta. Desempeñan un papel clave en el clima de la Tierra. Conocer el grado en que sus temperaturas han variado durante el tiempo geológico es crucial si queremos obtener una comprensión más completa de cómo se comportan y para predecir las consecuencias del cambio climático actual con más precisión".
OXÍGENO-18
Los autores del estudio indican que la metodología conocida hasta ahora es defectuosa porque la influencia de ciertos procesos fue pasada por alto. Durante más de 50 años, la comunidad científica basó sus estimaciones en los foraminíferos, que son los fósiles de pequeños organismos marinos que se encuentran en los núcleos de sedimentos tomados del fondo del océano.
Los foraminíferos forman conchas calcáreas en las que el contenido de oxígeno-18 depende de la temperatura del agua en la que viven. Por lo tanto, los cambios en la temperatura del océano a lo largo del tiempo se calcularon sobre la base del contenido de oxígeno-18 de los fósiles de foraminíferos encontrados en el sedimento. De acuerdo con estas mediciones, la temperatura del océano habría descendido en 15ºC en los últimos 100 millones de años.
Sin embargo, estos cálculos se basan en el principio de que el contenido de oxígeno-18 de los foraminíferos permaneció constante mientras los fósiles estaban alojados en el sedimento. De hecho, hasta ahora, nada indica lo contrario: ningún cambio es visible a simple vista o bajo el microscopio.
Para probar su hipótesis, los autores del nuevo estudio expusieron estos pequeños organismos a altas temperaturas en agua de mar artificial que contenía sólo oxígeno-18 y observaron la incorporación de éste en las capas calcáreas.
Los resultados muestran que el nivel de oxígeno-18 presente en las pruebas de foraminíferos puede cambiar sin dejar rastros visibles, desafiando así la fiabilidad de su uso como termómetro. "Lo que parecían ser fósiles perfectamente conservados no lo son. Significa que las estimaciones de paleotemperatura hechas hasta ahora son incorrectas", dice Sylvain Bernard, investigador del Instituto de Mineralogía, Física de los Materiales y Cosmoquímica (Francia), y autor principal del estudio.
Estas mediciones, en vez de mostrar una disminución gradual de las temperaturas oceánicas en los últimos 100 millones de años, simplemente reflejan el cambio en el contenido de oxígeno-18 en fósiles de foraminíferos.
Este cambio parece ser el resultado de un proceso llamado reequilibrio: durante la sedimentación, las temperaturas aumentan entre 20 y 30ºC, lo que provoca que las pruebas de foraminíferos se equilibren con el agua circundante.
En el transcurso de unos 10 millones de años, este proceso tiene un impacto significativo en las estimaciones de paleotemperatura, especialmente las basadas en foraminíferos que vivieron en agua fría. Las simulaciones por ordenador realizadas por los investigadores sugieren que las temperaturas del océano en las profundidades del océano y en la superficie del océano polar han sido sobreestimadas.
(SERVIMEDIA)
27 Oct 2017
MGR/man