El sindicato expresó su “dolor” y “consternación” por este fallecimiento, al tiempo que trasladó su solidaridad con los familiares, amigos y compañeros del piloto fallecido.

A su vez, pidió la adopción de medidas que permitan esclarecer las causas del siniestro y la puesta en marcha de aquellas que hagan posible prevenir y evitar nuevos accidentes.

UGT subrayó que el accidente de ayer tiene un “carácter laboral”, con independencia del tipo de relación contractual que tengan los pilotos con el Ejército.

Este tipo de siniestro “laboral”, según el sindicato, se suceden en la Comunidad de Madrid causando la muerte del trabajador accidentado.

“No podemos aceptar como un hecho inevitable el que se pueda perder la salud y la vida en el desempeño del trabajo y en base al profundo convencimiento de que todos los accidentes se pueden evitar”, remachó UGT.

El teniente del Ejército del Aire Fernando Pérez Serrano falleció como consecuencia del accidente que sufrió el F-18 que pilotaba cuando realizaba la maniobra de despegue, a causa de una pérdida de potencia en el aparato.