Según Ceballos, "es cierto que el grueso de los incendios tuvo lugar en Orense, pero el aire llevó las partículas en suspensión hacia El Bierzo, donde todos los medidores dejaron de funcionar" porque indicó que paran a partir de 500 microgramos de partículas por metro cúbico.

El aire de la ciudad de Ponferrada, municipio con 60.000 vecinos, contenía ayer más partículas en suspensión que el de muchas zonas de Galicia y lo mismo ocurrió con algunas zonas de Asturias, según el portavoz ecologista.

Indicó que pese a la situación las autoridades asturianas y castellanoleonesas no activaron planes por contaminación atmosférica y aseguró que, de hecho, carecen de ellos, ya añadió que tampoco pidieron a los vecinos de zonas próximas a siniestros que se quedasen en casa, ni cerraron los colegios.

Ceballos explicó que respirar estas partículas puede provocar problemas de salud y afirmó también provocan problemas de contaminación ambiental.