De esta manera, según los datos hechos públicos este lunes por el Banco de España, en valores absolutos los depósitos de las familias cayeron en 3.600 millones durante el séptimo mes del año.

En todo caso, con respecto al mismo mes de 2016, este indicador de la riqueza de los hogares españoles repuntó un 0,4%, al subir en 3.200 millones de euros.

En total, los depósitos de los residentes en España se situaron en 1,38 billones de euros en julio, lo que supone un 0,7% menos con respecto al mes anterior. En comparación con julio de 2016, bajaron un 1,6%.

Por su parte, los no residentes tenían depósitos por importe de 31.400 millones de euros, por debajo de los 33.400 millones de junio y de los 43.500 millones de julio de 2016.

La cuantía total de depósitos en España tanto de residentes como de extranjeros se situó en el séptimo mes del año en 1,42 billones de euros, un 0,8% menos que en el mes precedente (1,431 billones).