De esta forma, ya cuenta con un fondo de más de 746 millones de euros, de los cuales 111 son de carácter genérico y voluntario, que le servirían para afrontar posibles contingencias futuras en el caso de que fuese necesario, alcanzando así un índice de cobertura del 77,6%, que mejora en más de 20 puntos el dato medio del sector.

Caixanova ha obtenido al término del mes de abril un resultado antes de impuestos de 29 millones de euros, que se ha apoyado especialmente en el crecimiento de los márgenes obtenidos a través del negocio tradicional (5,5%), en fuerte contraste con la reducción generalizada que están registrando en el conjunto del sector.

Gracias a la mejora de los márgenes y al paralelo recorte de los gastos de administración en un 8%, Caixanova ha mejorado su eficiencia básica recurrente en 5,9 puntos en los últimos doce meses, hasta situarla en el 55,06%.

En cuanto a las principales magnitudes de su actividad, el volumen de negocio al término del mes de abril asciende a 43.178 millones de euros, con un crecimiento interanual de un 1,83% en recursos de clientes y de un 3,1% en préstamos personales e hipotecarios.

Una buena evolución si los comparamos con los datos provisionales del sector facilitados por la CECA, ya que el conjunto de las cajas de ahorros disminuye un 0,2% tanto los recursos de clientes como los préstamos hipotecarios. Así, se sitúa entre las diez cajas de ahorros que más han incrementado su inversión crediticia en los últimos doce meses. Pese a tal crecimiento, Caixanova continúa conteniendo la mora por debajo del 5%.