El tanatorio sí estaba climatizado, a diferencia del centro académico, tal y como explicó el funerario David Holguín en declaraciones a Onda Cero. “El tanatorio estaba bastante fresquito, porque está siempre climatizado”, por lo que los trabajadores abrieron las puertas a los jóvenes y les cedieron el ‘hall’ del centro.

“A los que estaban mejor los sacaron luego fuera; estuvieron en las zonas sombreadas. Les abrimos los aspersores de riego y las mangueras mientras que llegaban los padres, para que se fueran refrescando”, informó este empleado.

El 112 tuvo que atender ayer a 47 menores de este instituto porque se encontraban mal debido a las altas temperaturas. Cuatro de los jóvenes tuvieron que ser trasladados al hospital de Valdemoro, tres de ellos debido a crisis de ansiedad provocadas por el fuerte calor. Y es que las aulas de los institutos madrileños no tienen aire acondicionado.

El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Jesús Sánchez Martos, aconsejó en plena ola de calor que los niños se hicieran abanicos de papel, algo por lo que fue criticado. Esto puede ser “una terapia ocupacional muy importante para los niños, haciéndolo como lo hacíamos cuando éramos pequeños, dobla, dobla, dobla y tienes el abanico", dijo el consejero.

La Consejería de Educación está permitiendo a los diferentes centros escolares modificar los horarios para evitar las horas de mayor calor, a fin de prevenir las lipotimias que se están produciendo entre alumnos madrileños.

Además, varios institutos están desplazando a los alumnos a las aulas donde incide menos el sol, según informaron fuentes académicas a Servimedia. Muchos centros están a la espera de que se pueda cambiar el servicio de transporte escolar para empezar a modificar sus horarios.