Así lo indicó el sindicato después de que el Instituto Nacional de Estadística (INE) publicase hoy los datos de IPC correspondientes al mes de mayo.

Tras apuntar que España “está en fase de crecimiento”, UGT agrega que ese crecimiento “no se está reflejando en una mejora de la calidad de vida de los ciudadanos, ni mucho menos en una reducción de la desigualdad y la pobreza, que se ha acentuado en la sociedad española con las políticas de recortes y las reformas regresivas sufridas durante la recesión”. Así, “mientras la inflación se mantiene cercana al 2%, los salarios continúan estancados”, subraya el sindicato.

Por tanto, UGT señala que “para que la recuperación llegue a las familias, los salarios deben crecer, al igual que las prestaciones y las pensiones, no solo por justicia social, sino también por eficiencia económica, para favorecer el consumo y afianzar así el crecimiento económico y del empleo”.