Esta propuesta forma parte de una iniciativa de IGC, que plantea que la bajada del sueldo a los guardias civiles sea como una especie de "préstamo" al Estado, de manera que el dinero perdido se les devuelva cuando se supere la crisis económica.

Esta asociación de la Guardia Civil aseguró que debe reconocerse "por escrito que lo que se realiza con la disminución de sueldo, en el caso en que finalmente se produzca su imposición, es un préstamo de una parte del sueldo de los guardias civiles que, por solidaridad hacia el resto de la sociedad española de la que forman parte, le hacen al Gobierno de España para disminuir el déficit público".

Esto supone que, cuando se supere la crisis económica, "se restituya el 5 por ciento o cantidad que en cada caso se disminuyese el sueldo a todos y cada uno de los afectados".

Al mismo tiempo, IGC reclamó que también se establezca para los guardias civiles "un aplazamiento de una parte del pago de aquellas obligaciones esenciales que tienen contraídos los miembros de la Guardia Civil, como son la vivienda, educación, etc.".