El negociador europeo del ‘Brexit’ llama a no ser vengativos pero tampoco ingenuos

MADRID
SERVIMEDIA

El jefe de la negociación para el 'Brexit' de la Unión Europea, Michel Barnier, llamó esta miércoles a no “buscar revanchas” con el Reino Unido también a no ser “naïves” (ingenuos) ni limitar toda la agenda de la UE a la negociación del 'Brexit', y pidió la misma unidad que han mostrado los 27 en este ámbito al resto de parcelas de la política europea.

Lo manifestó en su comparecencia en la Comisión Mixta para la UE del Congreso de los Diputados, que comenzó congratulándose de la victoria de Emmanuel Macron en las elecciones presidenciales de su país, Francia, y desmarcándose del estereotipo de “tecnócrata de Bruselas” con que se caracteriza a los dirigentes y funcionarios de la Unión.

Barnier reconoció que la negociación de las condiciones de la salida del Reino Unido de la UE va a ser “muy difícil”, “grave” y “extraordinaria”, cosa que espera que siga siendo extraordinaria porque ello significaría que ningún otro país quiere abandonar la UE. Dijo que lamenta profundamente dicha salida del Reino Unido, y añadió que los países europeos, por sí solos, no tendrán fuerza para permanecer entre los 10 países más ricos del mundo de aquí a 2050.

El jefe de la negociación advirtió de que el plazo de dos años para consumar la salida del Reino Unido es “brevísimo”, por lo que habrá que negociar con eficacia las “muchas consecuencias” de todo tipo que supondrá. Señaló los sectores donde el 'Brexit' creará más incertidumbre; por ejemplo, los más de tres millones de europeos que viven en el Reino Unido y el más de un millón de británicos que viven en la UE. Esto se negociará con reciprocidad, no discriminación y mantenimiento de los derechos laborales y sociales, que será la primera prioridad y tendrá que estar resuelto en 2018.

Otro aspecto sería el de los fondos europeos comprometidos para siete años y que financiarán proyectos en la UE y el Reino Unido. “Solicitamos a los británicos aue salden las cuentas, ni más ni menos, y no les pediremos ni una libra más de lo que habían comprometido”, subrayó, advirtiendo de que si este tema tan “sensible” no se solventara habría que cortar muchos proyectos “de raíz”.

Un tercer tema difícil sería el de la frontera del Mercado Único y la libertad de circulación de personas, que se fijará entre Irlanda e Irlanda del Norte, teniendo en cuenta además que “el proceso de paz en Irlanda es muy frágil”. También a finales de 2017 o principios de 2018 debería estar fijado el acuerdo en este tema.

El nuevo acuerdo de libre mercado que se firme entre la UE y el Reino Unido tendrá la particularidad de que se hará desde una perspectiva de divergencia, no de convergencia, como ha ocurrido con los firmados con países externos a Europa, y según Barnier, tendrá que ser fuerte y libre, pero también de una “competencia justa”.

(SERVIMEDIA)
10 Mayo 2017
KRT/gja