Blasco detalló que el Gobierno ha reducido a 8,58 euros la inversión por inmigrante y año, frente a los 25,9 euros del año pasado, de modo que el Ministerio de Trabajo e Inmigración ha situado a la comunidad al nivel de regiones que no llegan a los 100.000 inmigrantes.

Así, explicó que Valencia es la tercera comunidad por la cola en el reparto de ayudas, a pesar de ser la tercera con más población inmigrante, 889.340 personas según datos del Padrón 2009, por detrás de Cataluña y Madrid, y la primera de la Península con más porcentaje de población inmigrante respecto a su población total (17,5%).

El consejero subrayó que el dinero del Fondo se utiliza, entre otras cuestiones relacionadas con la atención a los inmigrantes, para financiar las plazas en centros de acogida.

Asimismo, Blasco exigió al ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, que le explique el motivo por el que Andalucía, con 675.000 inmigrantes, ha recibido más financiación que la comunidad, donde residen 200.000 inmigrantes más.

Para el consejero valenciano de Solidaridad y Ciudadanía, “el reparto de ayudas que hace el Gobierno entre las comunidades es injusto se mire por dónde se mire porque no obedece a criterios objetivos sino a favoritismos políticos, con los que las regiones gobernadas por el PSOE salen claramente beneficiadas”.