Los médicos de familia, a favor de un impuesto sobre las bebidas azucaradas

MADRID
SERVIMEDIA

La Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) mostró hoy su apoyo a la introducción en toda España de un impuesto sobre las bebidas azucaradas como el implantado en Cataluña.

La organización señala en un comunicado que el sedentarismo y el aumento de alimentos y bebidas de alto contenido calórico son algunos de los factores que más han contribuido a que la proporción de obesos en España se haya duplicado en solo 20 años y que en la población infantojuvenil (entre 2 a 17 años) se registre un porcentaje de obesidad del 9,6%, uno de los mayores de Europa.

La semFYC recuerda que además de las implicaciones globales que tiene la obesidad para la salud, se ha comprobado una relación directa entre diabetes y obesidad: dos de cada tres individuos con Diabetes tipo 2 (DM2) tienen un Índice de Masa Corporal (IMC) mayor de 27.

“En términos alimentarios, el consumo regular de bebidas azucaradas y su introducción en la dieta es uno de los elementos que más significativamente ha contribuido al aumento de la tasa de obesidad. Hay que tener en cuenta que una lata de refresco contiene alrededor de 35 gramos de azúcar y se corresponde con 140 calorías”, explica Rodrigo Córdoba, coordinador del Grupo de Educación Sanitaria y Promoción de la Salud de semFYC.

En el caso de las bebidas azucaradas, concretamente, se ha constatado que las personas que consumen dos o más bebidas azucaradas por día tienen el doble de riesgo de tener síndrome metabólico, aumento de triglicéridos y disminución de colesterol HDL o colesterol “bueno”.

725 GRAMOS MENOS

La ssemFYC calcula que un impuesto del 20% sobre el precio básico podría lograr una reducción efectiva del consumo de calorías en la dieta del 4,7%, lo que puede suponer una pérdida de peso corporal de 725 gramos por año como promedio.

“La batalla por los impuestos sobre las bebidas azucaradas ha empezado ya a nivel mundial, y es la Organización Mundial de la Salud OMS la impulsora de la misma”, señala Rodrigo Córdoba.

En su comparación con otras casuísticas, el Grupo de Educación Sanitaria y Promoción de la Salud de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC)ha analizado recientemente en su blog que “el precio del tabaco tiene impacto en todas las dimensiones del consumo: prevalencia, cantidad consumida por los fumadores, iniciación y cesación. Además, dicho impacto varía entre grupos de la población, siendo en general mayor entre los jóvenes” y en este sentido, “por cada 1% que aumenta el precio del tabaco, disminuye la demanda total de tabaco (consumo y prevalencia) con una reducción del 0,37% para los adultos y del 0,74%, en jóvenes”.

Por otra parte, este Grupo de la semFYC también apunta como ejemplo la tasa impositiva especial a la que se someten las bebidas alcohólicas, según datos publicados, una subida del 10% del precio del alcohol produce una disminución del 4% del consumo. Con el alcohol, además, se debe tener en cuenta que “el consumo de alcohol a nivel mundial es unos de los obstáculos mayores para el desarrollo de los países, para reducir la desigualdad social y la pobreza”, señalan en su blog.

"Ahora, el impuesto sobre las bebidas azucaradas podría ayudar a reducir a medio plazo la prevalencia de la obesidad y la diabetes en el conjunto de la población", concluye la nota de la sociedad médica.

(SERVIMEDIA)
02 Mayo 2017
JRN/gfm