En principio, la propuesta se verá en la reunión de las mesas del Congreso y del Senado de la próxima semana. Según recordó Sáenz de Santamaría, fue el PP el que hace dos años propuso la congelación del sueldo de los parlamentarios y, por tanto, "somos los primeros que estamos dipuestos a asumir este recorte. Con lo que no estamos de acuerdo es con que paguen el recorte social los pensionistas".

Tal y como dijo ayer el presidente del PP, ahora "se deben hacer otros esfuerzos", como "revisar las subvenciones que paga el Estado, incluidas las de los partidos políticos, los sindicatos o las organizaciones empresariales".

Para el PP, existe "mucha actividad subvencionada que, a lo mejor en tiempo de crisis, tiene que sufrir un recorte para que no lo sufra gente que tiene que vivir con una pensión muy limitada y que ahora incluso tiene que acoger a sus hijos o nietos que están en el paro".

Sáenz de Santamaría insistió en que el Gobierno está "pidiendo un sacrificio muy grande a los más débiles" sin ofrecer a cambio ningún esfuerzo.

En este escenario, dijo que la portavoz popular, "la calle tiene derecho a estar muy enfadada con un Gobierno que sencillamente durante dos años se ha dedicado a dilapidar el dinero de todos, que nos ha llevado a una cifra histórica de parados y que ahora pide un sacrificio que los ciudadanos no están dispuestos a hacer".