La industria nuclear española pide que el mix energético se base en criterios económicos, no en "ideales" ni en "gustos"

- Defiende que ser eficientes pasa por aprovechar los activos de los que se dispone, incluidas las centrales nucleares

MADRID
SERVIMEDIA

La presidenta el Foro de la Industria Nuclear Española, María Teresa Domínguez, reclamó hoy que el mix energético español se fundamente en aspectos económicos, no en "ideales" ni en "gustos", sobre todo teniendo en cuenta la dependencia energética de España y la necesidad de ser eficientes.

En rueda de prensa, Domínguez dejó claro que España no puede permitirse ser "derrochadora" en materia energética, menos aún en la actual coyuntura económica. Para ser eficientes, es preciso "aprovechar las instalaciones que tenemos", tanto de gas, como de carbón, energía nuclear y renovables. "Eso también es eficiencia", sostuvo.

En este sentido, apostó por aprovechar los activos existentes y por prolongar la vida útil de las centrales mientras estas sean seguras y eficientes.

Defendió, asimismo, la competitividad de la industria nuclear que, atendiendo a criterios económicos, debería formar parte de cualquier mix, dijo.

Para la presidenta de esta organización que aglutina a la industria nuclear española, "España se está quedando un poco aislada" en comparación con otros países "al no afrontar la necesidad de que la nuclear forme parte del mix energético".

Asimismo, incidió en la necesidad de alcanzar un pacto de Estado en materia energética que permita a las empresas contar con la suficiente estabilidad regulatoria como para acometer las importantes decisiones e inversiones asociadas a la energía nuclear. De lo contrario, y a pesar de contar con medios y tecnología "brillantes", estas empresas invertirán fuera de España en lugar de hacerlo en el mercado español, donde tendrían un "trampolín de salida" muy positivo.

Además, indicó que ninguna empresa, de ningún sector, tomará la decisión de invertir en España mientras reine la incertidumbre en torno a la apuesta energética de futuro del país. "Hace falta un marco regulatorio estable" y las decisiones de renovación de las centrales "han de basarse en criterios económicos y de seguridad. No debemos asociar la energía nuclear a un Gobierno ni a un cambio de Gobierno", dijo en alusión a Garoña, y a la posibilidad de que un cambio en Moncloa prolongase su tiempo de operación.

SOBRERREGULACIÓN

Domínguez valoró la seguridad de la regulación española en materia nuclear. Habló incluso de una "sobrerregulación" que garantiza las inspecciones necesarias y las inversiones pertinentes para asegurar la seguridad y la mejora de las instalaciones. Cada año, las centrales españolas invierten más de 150 millones de euros en este capítulo.

Para la presidenta del Foro Nuclear, la gestión del Consejo de Seguridad Nuclear es, asimismo, tan transparente y sistemática que da las suficienets garantías por sí sola de que un reactor puede seguir operando.

Domínguez se declaró positiva en torno al futuro de la energía nuclear. A su juicio, la apuesta del Gobierno por las renovables "ayuda a ponerla en valor", ya que estas fuentes renovables requieren de una energía base de respaldo, como la nuclear.

Además, el documento de Zurbano plantea un futuro, en el horizonte de 2020, en el que todas las plantas actuales seguirán funcionando, con la sola expepción de Garoña que, con todo, "de momento, está operando y, al fin y al cabo, se le ha renovado la licencia por cuatro años".

Este año otras dos centrales han de renovar su licencia de explotación: Almaraz y Vandellós. Domínguez expresó su confianza y seguridad en que a ambas se les concederá la renovación (ninguna ha cumplido aún los 40 años de vida).

En 2009, los ocho reactores españoles produjeron 52.890 kilovatios por hora (KWh), un 17,61% de la producción eléctrica total, con un factor de operación del 80,1% en un año en el que hubo un mayor número de paradas programadas para recarga y mejoría de instalaciones.

(SERVIMEDIA)
05 Mayo 2010
CCB/gja