Según informó la entidad, la eliminación de la comisiones benefició entonces y desde un primer momento a los más de 2,4 millones de clientes que ya tenían su nómina o pensión domiciliada en Bankia.

Desglosado por tipo de ingreso, en 2016 Bankia captó 176.217 nuevas nóminas, mientras que atrajo 25.038 pensiones. Descontado el efecto de aquellos clientes que tienen domiciliada nómina y pensión, así como la evolución descendente de las prestaciones por desempleo, queda el citado incremento neto de 172.293 nuevos ingresos.

De esta forma, Bankia cerró el año 2016 con un total de 2.668.887 clientes con sus ingresos domiciliados en la entidad, frente a los 2.496.594 del cierre del año 2015.

Por su parte, el número de tarjetas de crédito se incrementó en el año en 279.714, mientras que el de débito subió en 242.856, para un total de 522.570 nuevas tarjetas en circulación.

Así, la subida del parque de tarjetas permitió incrementar la facturación en tasas superiores al 5,6%, con un mayor avance en compras (+8,9%) que en disposiciones de efectivo (+2,2%).

“Estamos muy satisfechos con este nuevo posicionamiento y con la respuesta que han dado los clientes. Queremos ofrecerles la mejor combinación del mercado, con una calidad de servicio excelente al precio más competitivo posible”, afirmó el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri.