Concretamente, en Barcelona y Girona, Meteorología ha activado la alerta amarilla por posibilidad de lluvias por la tarde, mientras que en las Baleares, concretamente en Menorca, el sobreaviso, también de color amarillo, es por posibles rissagas u oscilaciones del nivel del mar de 70 centímetros.

Las rissagas se dan en puertos, calas o bahías y están provocadas por causas meteorológicas como fuertes vientos en la troposfera. Si son muy intensas, pueden producir destrozos en los barcos amarrados e inundaciones en las infraestructuras portuarias.

Parece ser que la última gran rissaga que vivió Menorca se localizó en Ciutadella hace casi cuatro años, ya que se registró el 15 de junio de 2006. En aquella ocasión, las oscilaciones fueron de hasta cuatro metros y provocaron desperfectos en numerosas embarcaciones.

No obstante, para que se produzca una rissaga de estas características, es necesario que a las condiciones en las que ocurre normalmente el fenómeno, se sume una tormenta con fuertes vientos y cambios bruscos de la presión atmosférica, algo que no prevé para este sábado Meteorología.