En un comunicado conjunto, el sector pide un debate informado sobre las políticas de salud pública en torno al azúcar y señala que lo importante es centrarse en el total de las calorías consumidas.

Asimismo, defiende la necesidad de insistir en un consumo moderado y responsable y defiende al azúcar como un alimento que puede formar parte de una dieta variada y equilibrada en el marco de un estilo de vida saludable.

Por último, el sector insiste en la relevancia de las medidas educativas y el traslado de información veraz, basada en el consenso científico a los consumidores, como herramientas fundamentales para prevenir problemas de salud derivados de la alimentación.

En este sentido, apunta que la obesidad es un problema complejo y multifactorial que consiste en un desequilibrio entre ingesta y gasto energético y cuya solución no puede centrarse en un único ingrediente.