Además de estas dos organizaciones, en las marchas de la tarde participaron los sindicatos docentes UGT, STES y CCOO, así como asociaciones de vecinos, colectivos sociales, organizaciones estudiantiles y otros sindicatos de profesores.

En Madrid, la manifestación partió de la plaza de Neptuno para concluir en la calle Alcalá, muy cerca del Ministerio de Educación. Con el lema 'No a las reválidas, reversión de los recortes educativos y derogación de la Lomce', los asistentes corearon eslóganes como "tasas no, becas sí", "el hijo del obrero a la universidad", "sí se puede", "si esto no se arregla, guerra, guerra, guerra" o "si esto no se apaña, caña, caña, caña". Representantes de CGT, la Asociación de Mujeres Rurales Ademur, la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) y la Marea Verde también acudieron a la protesta.

MÁS PAROS

Las dos organizaciones convocantes aseguraron que habrá más huelgas este curso si el nuevo Gobierno mantiene las evaluaciones finales de ESO y Bachillerato. Ceapa le concedió un plazo de cuatro meses, el SE solo cuatro días.

“El 12 de noviembre, Ceapa presentará ante la Plataforma Estatal por la Escuela Pública una propuesta de huelga general y unitaria para febrero que en caso de que el Gobierno siga con su calendario de reválidas llevaremos adelante", dijo José Luis pazos, presidente de Ceapa.

Tras referirse a la dificultad que para muchas familias supone no llevar a sus hijos a clase un día, Pazos destacó que “lo hemos hecho por responsabilidad porque en unos años todos tendrán que enfrentarse a unas pruebas que, si no se remedia, intentarán expulsarles del sistema educativo”.

La secretaria general del SE, Ana García, tildó las evaluaciones de “regresivas y franquistas”, y afirmó que “si el lunes el nuevo Gobierno mantiene esta norma, volveremos a salir a la calle”. “Volveremos a vaciar las aulas como lo hemos hecho hoy, con el respaldo de nuestras familias”, y llamó al profesorado a unirse a ellos en próximos paros.

García aseguró que parte del "éxito rotundo" en la convocatoria de este miércoles se debe “al apoyo de nuestros padres”, y declaró que “el Ministerio demuestra que tiene miedo cuando limita el seguimiento al 30%". "Con más de 50.000 estudiantes manifestándose esta mañana en Madrid y en Barcelona, 11.000 en Bilbao y decenas de miles en Andalucía, hacen bien en temernos", concluyó.