El presidente de la Fptm, Julio Sanz, consideró esta situación “inaceptable”, ya que el taxi es un servicio público de transporte que, por ley, tendrá que tener una flota ecológica en su totalidad en 2020 y que hasta el momento “no está recibiendo las ayudas necesarias para poder cumplir con este objetivo”.

Así lo consideró también recientemente el portavoz socialista en Medio Ambiente y Movilidad, Chema Dávila, que valoró como “insuficiente” el dinero que el Consistorio destinó para este fin y propuso aumentar la partida presupuestaria hasta 1.500.000 euros para el periodo de 2017 a 2019.

La Fptm valoró muy positivamente la propuesta del PSOE y recordó que el colectivo del taxi “lleva años haciendo un tremendo esfuerzo por renovar su flota, ya que los taxistas somos trabajadores autónomos que siempre hemos financiado íntegramente nuestros vehículos”.

“De hecho, en la actualidad más del 80% de los taxis de Madrid son ya ecológicos, pero hay compañeros que a día de hoy aún no han podido asumir los costes de un nuevo vehículo”, explicó. Sin embargo, consideró que “aunque el fomento de la movilidad sostenible es, o debería ser, un compromiso compartido entre el Ayuntamiento y el sector del taxi, hasta ahora la implicación del Consistorio no ha estado para nada a la altura de la del sector”.