Por ello, exigió al Gobierno central, a la Junta de Andalucía y a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir acciones urgentes y contundentes a fin de proteger las aguas subterráneas y la rica avifauna del Parque Nacional.

Según la organización ambientalista, de los 16 sectores del acuífero, cuatro se hallan en estado de prealerta, ocho en alerta y otros cuatro en alarma.

Carlos Dávila, biólogo de SEO/BirdLife en el parque Nacional, explicó que “la excepcionalidad de las marismas del Guadalquivir no sólo se debe a que son un refugio para hábitats naturales y especies de destacado valor natural, sino también a que representan complejos procesos ecológicos y biológicos únicos en el mundo”.

Sin embargo, “los indicadores de seguimiento del espacio muestran que el funcionamiento de estos procesos se ha desconectado y que, de no tomar medidas urgentes y contundentes, los daños pueden ser irreversibles”, apuntó.

Todo ello influye en uno de los símbolos del paraje natural: su comunidad de aves acuáticas. Las poblaciones de especies antaño abundantes como la pagaza piconegra, la avoceta común o la cigüeñuela común se han reducido de forma alarmante, y lo mismo ha sucedido con especies en peligro de extinción como la garcilla cangrejera o el aguilucho lagunero occidental

Además, la escasez de lluvias y las altas temperaturas de esta primavera han perjudicado la reproducción de muchas especies este año, aunque Dávila advirtió de que no se trata de un hecho puntual, sino de una tendencia ecológica que lejos de mejorar, se agrava con los años.

La menor duración de la inundación de las grandes lagunas es otra evidencia del alarmante cambio que atraviesan los procesos naturales de Doñana.

Según los últimos datos de seguimiento, varias de las lagunas que se secaban de forma muy ocasional ahora ya se secan todos los veranos, y otras lagunas consideradas permanentes sufren altos grados de desecación, lo que reduce enormemente la superficie inundada y genera fragmentaciones.

ACUÍFERO EXPLOTADO

El experto aclaró que a pesar de que estamos en un ciclo seco, no se trata de un problema pluviométrico (falta de lluvias), ya que las situaciones más graves se localizan principalmente en los sectores donde se encuentran las extracciones intensivas para regadío.

Este hecho incumple el principio de no deterioro de la Directiva Marco del Agua y pone en riesgo el cumplimiento de las directivas de conservación de hábitats y aves, destacó seo/Birldlife.

Agregó que “el actual grado y modo de explotación de los recursos subterráneos en gran parte del acuífero impide el cumplimiento de los objetivos ambientales, y no garantiza el equilibrio entre la extracción y la alimentación del parque.

Por ello, pidió a la Junta de Andalucía y a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir cumplir con su obligación de fijar y hacer respetar las necesidades hídricas del humedal, limitar los usos y las actividades que afectan al estado del acuífero y cesar las extracciones ilegales.

Al descontrol en el uso del agua se suman otras amenazas como el reciente visto bueno del Gobierno en funciones a expropiar terrenos, dentro del proceso para la construcción de un almacén de gas a las puertas de Doñana.

Se desoyen así las recomendaciones del Consejo de Participación de Doñana y de la propia UNESCO, que ya transmitió al Estado la necesidad de evaluar el impacto acumulativo de este proyecto presentado en cuatro partes.

“Es inaceptable y un fracaso nacional que la joya natural por excelencia de España se encuentre en esta situación”, concluyó.