El cambio climático afecta a la calidad del plancton que comen los peces

MADRID
SERVIMEDIA

El aumento de la temperatura y la acidificación de los océanos debido al calentamiento global afectan a la composición de ácidos grasos de crustáceos planctónicos, lo que conlleva una menor calidad de los alimentos de algunos peces.

Así lo atestigua un equipo de biólogos del Centro Helmholtz de Investigación del Océano Kiel (Geomar), de Alemania, al realizar un experimento con organismos del fiordo de Kiel, situado en una bahía alemana al oeste del mar Báltico.

El estudio, publicado en la revista ‘PLOS ONE’, se basó en el uso de 12 mesocosmos o tanques en los que recogieron 1.400 litros de agua, a los que sometieron a dos temperaturas diferentes y dos concentraciones distintas de dióxido de carbono (CO2).

Después de un mes, examinaron el número y el tamaño del cuerpo de diferentes etapas de desarrollo de copépodos (crustáceos de pequeño tamaño), así como su contenido de ácidos grasos, crucial para el aporte nutricional que necesitan algunos organismos. Esos crustáceos miden hasta un milímetro y forman aproximadamente el 80% del zooplancton del planeta y son un importante alimento para peces y larvas.

“Varios experimentos han demostrado que los efectos de diversos factores ambientales sobre los organismos marinos o bien suman o bien disminuyen unos sobre otros. Debido a que las funciones del cuerpo de los organismos se alteran de manera diferente por la combinación de factores, es muy difícil calcular el resultado final”, explica Jessica Garzke, bióloga marina de Geomar y autora principal del estudio.

DETERIORO DE LAS REDES ALIMENTARIAS

Garzke señala que, en el caso de los copépodos, “el impacto negativo de la subida de la temperatura del agua es más importante que la acidificación del océano, que puede mitigar algunas de las reacciones”. “Por ejemplo, debido a que el dióxido de carbono adicional que se disuelve en el agua de mar es compatible con el crecimiento del fitoplancton como alimento para los copépodos. Pero, al final, estos beneficios no son lo suficientemente fuertes para lograr un efecto positivo”, añade.

El estudio es el primero en dar una idea de los efectos de la acidificación de los océanos y el aumento de temperaturas en la composición de ácidos grasos en una comunidad natural de copépodos. "De acuerdo con nuestras observaciones, la composición de ácidos grasos se ve afectada negativamente. Esto significa que la calidad de los alimentos a niveles superiores de la cadena trófica disminuye", enfatiza Garzke, quien apunta: "Las redes alimentarias, que son influenciadas por la calidad de los alimentos, no por la enorme masa de provisiones, se deterioraron”.

Los investigadores indican que sus resultados pueden extrapolarse a otras regiones costeras similares al fiordo de Kiel. "Debido a que los niveles de dióxido de carbono fluctúan considerablemente debido a las condiciones de flujo en el fiordo, los organismos pueden adaptarse a niveles elevados y sufren menos que sus contrapartes en otras aguas. Pero tenemos que tener en cuenta que más factores ambientales entrarán en juego en el futuro. Necesitamos más experimentos para investigar estos escenarios para las especies de importancia ecológica", concluye Garzke.

(SERVIMEDIA)
10 Ago 2016
MGR/caa