La ‘fiebre’ de la Tierra sube con nuevos récords históricos de temperatura

- Y de gases de efecto invernadero y de subida del nivel del mar en 2015, según un informe de 450 científicos

MADRID
SERVIMEDIA

El planeta Tierra batió el año pasado varios récords históricos relacionados con el calentamiento climático, como la temperatura global, las emisiones de gases de efecto invernadero, la temperatura de la superficie de los océanos, el aumento del nivel del mar y la reducción de la extensión del hielo marino en el Ártico.

Así lo recoge el informe ‘Estado del clima en 2015’, realizado por la agencia estadounidense NOAA (Administración Nacional Oceánica y Atmosférica) con la aportación de más de 450 científicos de 62 países y publicado en el Boletín de la Sociedad Americana de Meteorología.

El informe destaca que “la fiebre de la Tierra se eleva” porque en 2015 superó el récord de temperaturas globales de 2014, lo que se debe a una combinación de calentamiento global a largo plazo y uno de los episodios de ‘El Niño’ más fuertes registrados desde al menos 1950. Los científicos señalan que “la mayoría de los indicadores de cambio climático continuaron reflejando tendencias consistentes con el calentamiento global”.

El documento, de 300 páginas, está basado en decenas de miles de mediciones de múltiples conjuntos de datos y proporciona una actualización detallada de los indicadores globales del clima, los fenómenos meteorológicos notables y otros datos recogidos por estaciones recogidos en la tierra, el agua, el hielo y el espacio.

“El año pasado, ‘El Niño’ fue un claro recordatorio de cómo los acontecimientos a corto plazo pueden amplificar la influencia relativa y los impactos derivados de la tendencia al calentamiento global a largo plazo”, apunta Thomas R. Karl, director de los Centros Nacionales de Información Ambiental de la NOAA.

El informe señala que la temperatura de la superficie del planeta fue el año pasado “la más alta de la historia”, al registrarse entre 0,42 y 0,46ºC por encima de la media entre 1981 y 2010, superando así el récord anterior de 2014. Con ello, los termómetros marcaron los valores más altos desde mediados del siglo XIX y, por primera vez, más de 1ºC respecto a los niveles de la era preindustrial, gracias al “calor sin precedentes en todos los continentes habitados”.

MÁS GASES DE EFECTO INVERNADERO

Además, también hubo récord histórico de concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera, como el dióxido de carbono (CO2), el metano y el óxido nitroso. El CO2 tuvo una concentración media de 399,4 partes por millón, lo que supone 2,2 más en comparación con 2014.

La temperatura de la superficie del mar también batió récords (entre 0,33 y 0,39ºC más que la media), rebasando la anterior marca, de 2014. Las mayores desviaciones térmicas se produjeron en parte del noreste del Pacífico, continuando con la tendencia de calor anómalo iniciado en 2013, y del este del Pacífico ecuatorial, reflejo del impacto de ‘El Niño’. Por el contrario, las aguas del Atlántico Norte en el sureste de Groenlandia fueron más frías de lo normal.

En cuanto al nivel del mar, llegó a un nuevo máximo histórico en 2015, con 70 milímetros más que en 1993, cuando se iniciaron las mediciones por satélite. En las dos últimas décadas, el nivel del mar ha aumentado a una media de 3,3 milímetros por año, con las mayores tasas de incremento en el Pacífico y el Índico occidental.

Por otro lado, los ciclones tropicales superaron la media, con 101 episodios en todas las cuencas oceánicas durante el año pasado, por encima del promedio de 82 registrado entre 1981 y 2010. El centro y el este del Pacífico tuvieron 26 tormentas con nombre, la mayor cantidad desde 1992. Por el contrario, estos fenómenos disminuyeron en el Atlántico Norte.

Respecto a las precipitaciones, el año pasado hubo una mayor variabilidad en todo el mundo, con lluvias superiores a lo normal que dieron lugar a grandes inundaciones en muchas partes el planeta y un incremento de las zonas de sequía severa del 8% de 2014 al 14% de 2015.

La temperatura de la superficie terrestre del Ártico fue 1,2ºC superior a la media entre 1981 y 2010, superando los récords de 2007 y 2011, y la máxima extensión del hielo marino de esta parte del globo alcanzó en febrero de 2015 el mínimo histórico de los 37 años de registros por satélite, mientras que la extensión mínima de septiembre fue la cuarta más baja de la historia.

Por último, 2015 fue el 36º año consecutivo de retroceso glaciar en las montañas en todo el mundo. En todo el hemisferio norte, la capa de nieve a finales de la primavera continuó con su tendencia descendente y junio registró la segunda más baja de 49 años de datos recogidos por satélite.

(SERVIMEDIA)
03 Ago 2016
MGR/caa