"Es incríble lo que ha sucedido, esto es muy duro para nuestro país", declaró a Servimedia, mientras seguía las imágenes de la catástrofe por televisión, María Pikula, secretaria de Aguila Blanca, radicada en Alcalá de Henares (Madrid), una de las localidades españolas que desde hace años congrega a más ciudadanos polacos, de los que hay unos 5.000 en toda España.

Sobre el presidente del Gobierno fallecido, dijo que "era sobre todo una buena persona". "Se ha podido criticar su gestión, que se ha visto dificultada por la crisis, pero ahora no es el momento de hablar de cosas negativas. Esto es muy duro para nosotros", afirmó la portavoz de la asociación, que evocó con cariño su charla con el mandatario muerto durante su visita a la Expo de Zaragoza.

Aguila Blanca ha convocado para esta tarde, a las 20.30 horas, una misa de recuerdo por los fallecidos en la iglesia Santa Lucía de Alcalá de Henares, donde suelen acudir los polacos residentes en el municipio complutense.

La aeronave se desestabilizó cuando se encontraba a unos pocos centenares de metros del aeropuerto, en medio de una intensa niebla, y se incendio al impactar en tierra.

Junto el presidente polaco viajarían su esposa, el gobernador del Banco Central, Slawomir Skrzypek, el responsable del ejército y el jefe de la administración presidencial. Se trasladaban a Rusia con motivo de la celebración del 70 aniversario de la masacre del bosque de Kathyn, en la que la Unión Soviética ejecutó en masa a ciudadanos polacos durante la Segunda Guerra Mundial.

Kaczynski alcanzó la presidencia de Polonia en 2005, liderando el partido Ley y Justicia con su hermano gemelo Jaroslaw, que fue elegido primer ministro. Ambos dirigieron el país hasta 2007, año en el que Donald Tusk, actual primer ministro, venció en las elecciones legislativas.