Así lo indicó este dirigente del PP en una entrevista en la Ser recogida por Servimedia, donde dijo que no sabe si la fecha que en un principio barajó Rajoy para una posible sesión de investidura, el 2 de agosto, está o no desfasada. “Ojalá que no, pero dependerá de lo que suceda estos días y de los contactos con el Rey”, afirmó.

“Soy una persona pragmática y posibilista y tengo confianza en esas reuniones porque, efectivamente, a lo mejor en un momento de serenidad todo el mundo hace una segunda lectura de lo que está pasando y abandonamos el ‘no es no’. La nueva política tiene que conjugar más el verbo 'pactar' que el 'bloquear'”, aseveró.

En este sentido, Maroto subrayó que ha visto en Mariano Rajoy y en toda la dirección nacional del partido “la extrema voluntad de decir ‘también de este tema hablamos, también de este otro hablamos’, aunque no estemos convencidos es necesario llegar a consensos”.

La reforma laboral, la ley de seguridad ciudadana, la ley educativa o “cualquier otro tema” pueden ser objeto de debate con Ciudadanos y el PSOE, explicó el vicesecretario popular, escudándose en que en estos momentos “es fundamental alcanzar acuerdos”.

“Algunas cuestiones de la reforma laboral, y lo hemos ofrecido, podrían modificarse y suavizarse. Es una cuestión que conocen perfectamente PSOE y Ciudadanos”, manifestó, al tiempo que dijo que la respuesta por parte de estos partidos es que no quieren hablarlo. Sobre la ley de seguridad ciudadana, dijo que el PP está “dispuesto a estudiar” las propuestas de Pedro Sánchez y Albert Rivera.

A este respecto, apuntó que el PP “no quiere dejar ningún tema sin tocar hasta conseguir el desbloqueo de la situación, que pasa por el ‘sí’ de Ciudadanos y la abstención del PSOE como mínimo”. “Nuestra obligación es ser absolutamente generosos y hábiles en la negociación”, insistió.

Maroto lamentó la falta de predisposición del PSOE y C’s en estas negociaciones. “La situación es la siguiente: cada vez que nos acercamos a Ciudadanos o al PSOE con una propuesta o con un documento para que lo estudien y lo analicen, su respuesta es 'no queremos leer o estudiar nada'”, criticó.

En cambio, prosiguió, si la propuesta del PP llevase un título sería “no a las líneas rojas”, ya que la única cuestión sobre la que los populares no están dispuestos a hablar es “la propia unidad de España, la igualdad de todos los españoles y la soberanía nacional”. Por lo demás, apuntó que no dejarán de moverse “ni un solo día” para evitar unas terceras elecciones.