Fernández se paró delante de los periodistas para justificar, como en otras ocasiones, que lo que tiene que decirle a Sánchez se lo dice a él sin necesidad de darle resonancia pública, y que además lo comentará mañana en la reunión del Comité Federal, que es a puerta cerrada.

Díaz, cuya reunión con el secretario general apenas llegó a la media hora, fue abordada por los medios a su llegada a Ferraz y perseguida a la salida, después de que renunciara a comparecer ante las cámaras a dar su versión de los hechos y de la posición que debe mantener el PSOE.

La presidenta andaluza se limitó a comentar a los informadores que su posición es "sobradamente conocida" (se ha pronunciado varias veces a favor de votar que no a la investidura de Mariano Rajoy), y que había acudido a Ferraz a conocer la "hoja de ruta" de Sánchez.

La reunión con Díaz fue la última de las 15 que ha mantenido el líder del PSOE como preparación del Comité Federal de mañana. Antes del mismo, todavía tiene previsto encontrarse con la secretaria general del PSN, María Chivite; el del PSOE de Ceuta, Manuel Hernández Peinado, y la presidenta de la gestora que dirige el PSOE de Melilla hasta que un congreso designe un sucesor al dimitido Gregorio Escobar, Gloria Rojas.