De acuerdo con los datos de UGT, de las diez empresas que fabrican vehículos en España, sólo dos, General Motors y Mecedes Benz, no están aplicando durante el primer trimestre del año ningún expediente de regulación de empleo.

Sin embargo, las demás fabricantes, como Fasa-Renault, Iveco-Pegaso, Ford, Santana Motor, Seat, Citroën, Nissan y Peugeot Talbot, se han visto obligadas a recurrir a la regulación de empleo para afrontar la crisis.

Los trabajadores de Fasa-Renault son los más afectados por expedientes de regulación en este trimestre, un total de 14.725 empleados en el primer trimestre de este año, junto cn Citroën (8.267 trabajadores) y Ford (7.759 trabajadores).

A ellos hay que sumar otros 6.000 empleados de los 7.000 que integran la plantilla de Nissan, 4.800 trabajadores de Peugeot Talbot, 4.616 de Seat, 4.365 de Iveco-Pegaso y 2.773 empleados de Santana Motor. Según UGT-Metal, todos los expedientes han sido acordados con los sindicatos.

Pese al importante número de trabajadores de fabricación de automóviles afectados por expedientes, UGT-Metal considera que "no puede hablarse de crisis generaizada del sector de automoción a nivel estructural, sino más bien de medidas de carácter coyuntural".

Los datos de UGT recogen sólamente los trabajadores afectados por expedientes en las empresas fabricantes de coches, pero hay que tener en cuenta que también sufren regulaciones de empleo los empleados de la industria auxiliar como consecuencia de la caída de la actividad de los fabricantes y los concesionarios al caer las ventas de coches.

Los responsables de UGT-Metal aprovechan para exigir nueamente a la Administración que reduzca la imposición del automóvil, que sitúa a España como el país donde más se grava la compra de un coche en toda Europa.