Diversos desórdenes y destrozos en propiedades tuvieron lugar en las noches del pasado vernes y sábado en Pamplona y otras localidades de la Comunidad Foral, tras las manifestaciones conovocadas por Jarrai, HB y Gestoras pro amnistía para protestar por las torturas y asesinatos de Lasa y Zabala, cuyos restos, presuntamente, han sido identificados en Alicante.

El Ayuntamiento de Pamplona evaluó en más de 33 millones de pesetas los daños sufridos en el mobiliario urbano estos pasados días. Un total de 42 contenedores han sido quemados, varias cabinas de teléfonos quedaron destrozadas y muliples cristales de vehículos y entidades bancarias fueron rotos.

Junto a todo ello, los mayores destrozos se produjeron en las oficinas del INEM de un barrio de la capital navarra, a cuyo interior fue lanzado un cóctel molotov que provocó un incendio y daños por valor superior a los 15 millones de pesetas.

Por otro lado, el delegado del Gobierno en Navarra, Cesar Milano Manso, quien animó a los ciudadanos a terminar con estos hechos violentos, hizo un primera valoración de los daños ocasionados e varias localidades de la comunidad durante el fin de semana, que rondarían entre los 20 y los 30 millones de pesetas.

También se produjeron importantes incidentes callejeros en Alsasua, Tafalla y Estella, con destrozos en sucursales bancarias y en mobiliario urbano.